EL PAÍS DE LA FELICIDAD

Hace un tiempo estuve en La Habana, y una de esas noches que salimos a mezclarnos con la ciudad, sentí muy buen rollo al ver los niños jugando en la calle, gente riéndose en voz alta, música de la que se baila, familias conversando…y todo entre penumbras! Ya que en Cuba no hay dinero para farolas ni electricidad pública...

El caso es que a la gente parecía no importarle demasiado la oscuridad, ni la falta de agua corriente en las casas, ni las prohibiciones, ni el hambre… ellos sonreían y parecían felices entre ruínas.

Lo que me hizo reflexionar… cada país medimos nuestra riqueza con el PIB (el valor monetario de la producción de bienes y servicios finales) y yo pienso, la producción de bienes y servicios finales no tiene como finalidad última ser humano su felicidad? Por lo tanto, no sería lo correcto medir esto último para comprobar si funiona el sistema?

Foto: felices al llegar a la cumbre

Bueno, pues hay un país que ya lo pensó mucho antes de que yo comenzara es escribir en este blog. Se trata de  Bután (entre India y China) en donde el PIB es reemplazado por la Felicidad Nacional Bruta (FNB) .En efecto, se trata de un país, en donde la riqueza no es medida por las pertenencias que una persona pueda tener, sino más bien por el grado de felicidad de la misma.

            EL PAÍS DE LA FELICIDAD

Los varemos usados para medir La Felicidad Nacional Bruta en Bután son: bienestar psicológico, salud, educación, buen gobierno, vitalidad de la comunidad y diversidad ecológica. Voy a poner un ejemplo de cada uno, ahora que me he motivado J:

Bienestar psicológico: no stress, ansiedad o depresión.

Salud: hay enfermedades que pueden erradicarse y a las farmacéuticas no le interesa?

Educación: Para  poder desenvolverte sin miedo necesitas conocimiento...

Buen gobierno, del que escucha al pueblo y no crea injustas diferencias sociales como que los políticos necesiten cotizar tan sólo 7 años y resto del pueblo 35 años.

Vitalidad de la comunidad: Obesidad infantil, niños que crecen y son educados por el TV. Vida rutinaria y sedentaria.

Y la diversidad ecológica: este me cuesta un poquito más, en Wikipedia pone “número de especies presente y el equilibrio demográfico entre ellas”. Vale, si no hay pasto para tanta vaca como comemos, vamos a intentar comer menos vacas?

Como colofón, os dejo un temilla cuyo estribillo espero que se os venga a la cabeza alguna vez...

                   

El 2 de junio de 1974, en su discurso de coronación a Bután, Jigme Singye dijo: “La felicidad interior bruta es mucho más importante que el producto interior bruto“. Hoy países como Japón estudian incorporar la felicidad entre sus índices de progreso.

Hala, a ser felices! :)